"Anoche, a las doce y media próximamente, el Celador de Policía No.451, que hacía el servicio de esa zona, encontró, entre las calles Escobedo y García, a un individuo de apellido Ramírez casi en completo estado de postración. El desgraciado sangraba abundantemente por la nariz, e interrogado que fue por el señor Celador dijo haber sido víctima de una agresión de parte de unos individuos a quienes no conocía, sólo por haberles pedido un cigarrillo. El Celador invitó al agredido a que le acompañara a la Comisaría de turno con el objeto de que prestara las declaraciones necesarias para el esclarecimiento del hecho, a lo que Ramírez se negó rotundamente"Este es el párrafo inicial del cuento Un hombre muerto a puntapiés, del escritor lojano Pablo Palacio, una de las obras más leídas y comentadas de la literatura ecuatoriana del siglo XX.
También para los cineastas ha sido una tentación llevar al cine este cuento sobre investigación policial, sobre la moral de principios de siglo, la violencia infundada, el sugerido 'vicio' y sobretodo debe tentar a los cineatas recrear el aire de ciudad lúgubre, húmeda, puritana y misteriosa.
Para Sebastián Arechavala la tentación se pudo hacer realidad cuando consiguió del propio hijo de Pablo Palacio, la autorización para adaptar dicho cuento.
Este miércoles 28 de mayo, a las 20:30 el realizador Sebastián Arechavala estrenará su ópera prima, el cortometraje Un hombre muerto a puntapiés.
El corto se ha estrenado internacionalmente:
El pasado mes de marzo estuvo en Competencia Oficial en el 48 Festival de Cine de Cartagena. Representó al Ecuador entre los mejores 23 cortometrajes de ficción de Iberoamérica.
En abril el corto fue parte de la Segunda Muestra de Cine Ecuatoriano, organizada por la Embajada del Ecuador en Washington DC, EEUU.
La semana pasada Un hombre muerto a puntapiés participó en el Shortfilm Corner, mercado de cortometrajes del Festival de Cine de Cannes.
El equipo:
Sebastián Arechavala es el guionista, director y editor del corto. El director estudió en la Escuela de Cinematografía y el Audiovisual de Madrid (ECAM), en la Escuela Superior de Artes y Espectáculos TAI de Madrid, y en la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños, en Cuba. Un hombre muerto a puntapiés es su ópera prima.
Actuación: Marco Bustos e Iván Alzate
Fotografía: Daniel Andrade
Sonido: Juan José Luzuriaga
Arte: Paúl Rosero
Producción: Randi Krarup
La cita: Miércoles 28 de mayo, a las 20:30 en el Ocho y Medio Quito (Floresta Valladolid y Vizcaya). La entrada es libre.
El estreno de Un hombre muerto a puntapiés contará con la presencia de Pablo Palacio Palacios, hijo del escritor.
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http://www.unhombremuertoapuntapies.com/
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